Parte 3 de nuestro roadtrip por el oeste americano, atacamos una caminata endiabladamente difícil y llegamos al famoso parque del Gran Cañón.
Este artículo forma parte de una serie sobre un roadtrip americano por el oeste. Te sugiero que empieces por el principio o los días previos :
- Descripción de nuestro viaje por carretera
- Llegada a Phoenix
- Zoo y Sedona
- «Esto es lo que yo llamo un entrenamiento»: esto es lo que yo llamo hacer deporte
- «Sois muy valientes mamá y papá»
- «Ojalá tuviera tanta motivación» : Ojalá tuviera tanta motivación
Día 6
Así que despertar en el camping, pequeño burrito de desayuno traído por un productor local que hizo sus propias salsas picantes, miel y huevos, muy bueno. Yo tomé uno con guindillas verdes, y para mi mujer, uno con salchicha, del que nuestro mayor casi se comió la mitad.
Entonces, nos vamos, aquí está la ruta tomada ese día, como puedes ver, hay bastante :
La primera parada fue el sendero del Puente del Diablo, una caminata muy conocida en la zona que le llevará a subir un edificio rocoso, y le permitirá caminar sobre el famoso puente del diablo.
Sé que parece muy impresionante y apretado por las fotos, pero en realidad, como puedes ver por mi altura, no es tan peligroso. El viaje, en cambio, con los dos niños, fue muy muy muy difícil, y contamos con las felicitaciones y los ánimos de casi TODOS los que nos encontramos:
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Básicamente, el paseo duró más de 3 horas, bajo un sol que estaba presente pero oculto por las nubes, y tuvimos que turnarnos para ir a la última etapa, ya que realmente se sube demasiado para intentarlo con un bebé a cuestas. Es muy bonito, os recomiendo hacerlo, pero tened en cuenta que requiere un mínimo de forma física (he dicho mínimo), y que hay que ir temprano, porque el parking ya estaba lleno cuando llegamos sobre las 9:30, y tuvimos que aparcar en el arcén.
También tenga cuidado si se encuentra en el período de inundaciones repentinas, esta es una zona de riesgo.
Después de beber un montón de Gatorade para los electrolitos, volvimos a la oficina de turismo, que nos recomendó una ruta alternativa, lo que nos permitió pasar por un antiguo cráter de volcán y las ruinas de los nativos americanos.
Era muy extraño ver la tierra completamente negra, un color profundo que nos hacía sentir que algo importante había sucedido allí hace miles de años.
Tuvimos la suerte de ver antílopes salvajes, sí, lo mismo que en África.
En cuanto a las ruinas, debo admitir que me emocioné menos, ya que no me gustan especialmente este tipo de cosas. Pero hay mucho que ver, y está bien presentado.
Este desvío nos llevó mucho más tiempo de lo esperado, así que nos dirigimos a Cameron, una ciudad totalmente olvidada, pero la última oportunidad de civismo en cientos de kilómetros. Comimos en el Burger King más cutre del mundo, como puedes ver:
Conduje de noche hasta el camping del sur del gran cañón, no es un momento agradable ya que no hay luz en la carretera, y es una zona muy rica en fauna. Así que no quería atropellar a un ciervo.
Habíamos escogido el camping Mather, porque sencillamente era el único que todavía tenía un espacio (sólo para discapacitados, a menos que fuera el último) :
Al final todo fue bien, y nos instalamos tranquilamente en nuestra parcela sin ofrecer nada, ni agua ni electricidad.
Día 7
Bueno, como puedes imaginar, nos levantamos temprano ya que el Gran Cañón, bueno… ¡Es grande!
Una vez que llegamos alrededor de las 7 u 8 al centro de información (que no abre hasta alrededor de las 9:30/10, una pena en un lugar turístico), nos dimos cuenta de que no podíamos utilizar todos los caminos con nuestra caravana, ya que tenía 25 pies de largo, y estaba limitada a 21 o 23.
Así que fueron inteligentes, crearon un sistema de lanzaderas muy bueno, que funciona todo el tiempo, y que recorre todo el sitio. Nos dimos cuenta de que, de todos modos, habría sido difícil aparcar en la mayoría de los aparcamientos de los miradores, ya que sólo hay unas pocas plazas para muchos turistas.
Aquí hay un mapa de la zona (nosotros entramos por la derecha, en Desert View):
Bueno, te recomiendo que aparques en el centro de visitantes, tomes la lanzadera azul y luego la roja. Las vistas más bonitas están en la línea roja, pero se puede hacer todo a pie (cuidado, el mapa no está a escala, mira las distancias).
Podrá ver hermosos picos rocosos, el río Colorado y muchas cosas maravillosas.
Como ya sabrás, odio el mundo, y pensé que ya estaba lleno en septiembre, así que si vas en julio, prepárate para esperar y beber agua.
Personalmente, el Gran Cañón no era uno de mis favoritos, ya que es muy seco, y prefiero los bosques con masas de agua como en Canadá.
Dormimos en el mismo campamento (pero no en el mismo lugar) antes de partir al día siguiente hacia Page. Justo antes de la comida, un grupo de ciervos de cola blanca se paseó tranquilamente por el campamento, lo que nos permitió obtener algunas fotos estupendas y una vista relativamente cercana.
Continuación del viaje con Antelope Canyon y Page